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¿Qué opinan las teachers? Libro papel vs. Libro digital

 

Inspirados por la noticia que publicamos en nuestra edición pasada que se intitulaba "Las escuelas suecas guardan las tablets y vuelven a los libros", quisimos saber qué opinaría nuestra comunidad de Teachers' sobre la elección entre libro papel vs. libro digital. Hicimos una breve encuesta que respondieron más de cien teachers.  Compartimos con ustedes los resultados y comentarios.


Después de obtener los resultados del examen PIRLS(Progress in International Reading Literacy Study), que demuestra que los niños han retrocedido en el desarrollo de su comprensión lectora, la Ministra de educación sueca Lotta Edhol tomó la decisión de invertir gran parte del presupuesto del estado en redireccionar las políticas educativas hacia el uso de libros en papel, ya que para ella “la reforma hacia la digitalización ha llegado demasiado lejos”.

Algunos datos relevantes que arrojó nuestra encuesta:

De 93 respuestas, 65 se pronuncian a favor del papel y sólo 1 persona opta por lo digital. Sin embargo, 26 teachers piensan que el libro digital complementa la actividad en aula.

Preferencia (1)

Cecilia Lainz del Colegio Padre Luis Etcheverry Boneo  de la Ciudad de Buenos Aires prefiere  "que cada alumno trabaje en clase con su propio libro en papel", sin embargo destaca que "el soporte/acompañamiento del formato digital es un excelente complemento".  

En ese mismo sentido Nair Elias del Saint Patrick's Institute / ARICANA de Rosario, Santa Fe opina que "en el aula me gusta que los alumnos tengan su libro en físico pero yo utilizo el libro en digital con un proyector o pantalla y me parece el mejor método".

Esta preferencia del papel versus lo digital conlleva a tener en cuenta varios factores, como el contexto tecnológico -no todos los establecimientos cuentan con la infraestructura necesaria- hasta los económicos y pedagógicos.  Sobre esto opina Marisa Ortiz del Colegio San José I.P.33  de Paso de Los Libres, Corrientes,  cuándo nos cuenta que "v
ivimos en un pueblo chico al que no llegan editoriales para mirar los libros. Todo es en forma virtual y no es lo mismo. Este año elegimos y son feos, justamente porque nos mostraron en forma virtual. La escuela no está adaptada para dar en forma virtual. Ha cambiado mucho con la tecnología. Sería genial pero estamos muy atrasados en la Argentina".

Los problemas de importación que sufre el país también empujan la elección.  María de los Ángeles Fernández de la Escuela Argentina Modelo de Capital Federal opina que "sinceramente me gusta mucho mas el libro de papel. Últimamente y debido a la falta de stock estamos eligiendo lo que nos aseguran estará disponible para los alumnos. No tanto por lo que nos gustaría".



Selección Material

A pesar de la preferencia por el papel, muchas teachers coinciden en que lo digital se fortalece cuando funciona en conjunto. Marina Aiello del Joy School of English de Buenos Aires se pronuncia en ese sentido cuándo dice que "no me gustan los libros digitales para trabajar en el aula. Sí me resulta útil que los alumnos usen material digital para trabajar en sus casas. El hecho de que tengan sus workbooks en papel y una plataforma virtual suma muchísimo y mejora el aprendizaje ya que duplica la posibilidad de ejercitar".

En este mismo punto coincide Virginia Varela del Seaside Institute de Mar del Plata al afirmar que "e
n el caso de libros para la enseñanza del idioma, prefiero siempre el libro de papel, aunque debo admitir que todo el material que recibimos en las páginas de las editoriales es muy bueno. En el caso de los libros de literatura, "readers", no me molesta que sean digitales".


Ayuda KEL

"Creo que como docentes no podemos dejar de lado lo digital ya qué es lo más motivante para los estudiantes" comenta Graciela Arnaiz del  Knightsbridge School of English , y agrega que "nosotros usamos ambos tipos de libros en el aula".

Calendaria Gordillo  del Dailan School & Sports  de Buenos Aires instala la idea de que lo digital es más preponderante a medida que el nivel es más alto. Lo grafica de la siguiente manera: " Yo trabajo en nivel primario, y lo aclaro por que el recurso digital me parece que es más beneficiosos a medida que el nivel es más alto. Me gusta combinar ambos medios, papel y digital, salvo en los libros de literatura, que me inclino aún más por el papel, si bien las actividades u otros recursos que acompañan al libro puedan ser digitales (audios por ejemplo)"

Pandemia y Crisis Atencional

Herbert Simon fue, según Wikipedia,  la primera persona en articular el concepto de economía de la atención cuándo declaró que "en un mundo rico en información, la riqueza de información significa una escasez de otra cosa: la escasez de lo que sea que la información consuma. La información que consume es bastante obvia: consume la atención de sus destinatarios".

Sobre este punto y la crisis atencional de los alumnos opina Miriam Duran del
St. Michael's College  cuándo opina que "n unca es lo mismo mover un cursor que dar vuelta la página de un libro en papel. Hasta el olor, textura y encuadernación del libro atrae para quien ama la lectura. Lo tangible posiciona mejor en el espacio y orden de los contenidos. Lo que uno desee señalizar o escribir, ahí queda, de manera fija y segura. Sin duda, el uso excesivo de pantallas, especialmente en lo lúdico, ha reducido la capacidad atencional de los alumnos y, por ende, la concentración y comprensión lectora, además de provocar adicción".
La pandemia también comienza a reflejar sus efectos. Para la teacher del St. Michael's College "en pandemia, la necesidad de conectarnos virtualmente ha llevado a los niños a explorar más en el uso de las tecnologías y hoy tenemos deficiencias en lo cognitivo, observamos en muchos alumnos falta de memoria a corto y a largo plazo. Los docentes me han informado sentirse más cómodos con el libro en papel. Asimismo, el uso de dispositivos en el aula (en secundaria, donde también coordino la sección de inglés) nos ha acarreado un sinfín de situaciones ajenas a la consigna planteada por el docente. Conclusión, ni una duda al respecto de la permanencia del libro como fuente confiable y de buen uso".

Más allá de estos efectos no deseados, es válido el punto que plantea  Beatriz Lopez de Approaches, Instituto de Inglés de Río Negro cuándo comenta que "s i bien el libro de papel es lo óptimo, en mi opinión no podemos negar lo virtual, pero sólo como una herramienta importante que en algunos casos permite acceder a la educación. Libro digital exclusivamente, definitivamente no!"

Para Ingrid Ojeada, del Formal English Institute de Santa Cruz, "la lectura, aquí en FEI,  es muy importante. De hecho contamos con una sección que es Reading Club, tanto para niños hasta adultos. Con toda esta experiencia realmente considero que contar con material físico es super importante"


Lo digital como complemento


Hoy las teachers utilizan muchos recursos para preparar sus clases, como es el caso de  María Sol Rulli  del San Isidro Delta: "h oy en día utilizo mucho las redes sociales para seguir a colegas y asesores de educación quienes recomiendan distinto tipo de material. También trato de anotarme en las distintas editoriales para recibir novedades. Creo que el material concreto es algo que no se puede perder, ya que muchos alumnos necesitan del material tangible y medible para avanzar con menos frustraciones. Hoy las metas deben ser cortas, creo en la evaluación formativa, utilizando unidades cortas que tengan un hilo conductor.

Para Lucila Rome del St. John's de Buenos Aires, "con los chicos más chicos (primaria y secundaria básica) prefiero usar libros de papel. Con los chicos más grandes (secundaria superior) también prefiero, pero se puede trabajar bien con libros digitales".

Y si de las casas de altos estudios  hablamos,  María Teresa La Valle de UNTREF/ULP/IIF-SADAF-Conicet indica que "en el ámbito universitario creo que todos acordamos que el papel es incomparable. Sin embargo, en vista de la cantidad de bibliografía con la cual trabajamos y el alto costo de los libros, a veces hay que renunciar al papel".